El pan ayuda a la nutrición y compensa la dieta de los enfermos renales”, según afirma añade la presidenta de Alcer Madrid, Iluminada Martín-Crespo,en la celebración de la XIII Jornada de Enfermos Renales.
El pan es un alimento ideal, que aporta hidratos de carbono complejos, proteínas, vitaminas y cantidades reducidas de potasio y reducido en sodio en el pan sin sal. El consumo del pan puede ayudar al mantenimiento de los componentes nutritivos necesarios para una dieta equilibrada, según viene explicando la campaña ‘Pan Cada Día’ que ha colaborado con la Asociación Española de Enfermos Renales de la Comunidad de Madrid (Alcer),
El pan es un producto con propiedades organolépticas y nutricionales avaladas científicamente y recomendado en la alimentación de todos los grupos de edad, según los datos extraídos del estudio sobre “Evaluación del impacto del consumo de pan, tanto integral como blanco, en una población de edad avanzada con alto riesgo cardiovascular: una aproximación metabólica” elaborado por los investigadores del programa Igenio-Consolider de Alimentos Funcionales del departamento de Nutrición y Bromatología de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona, confirman que las personas que consumen pan a diario presentan unos parámetros clínicos más saludables desde el punto de vista cardiovascular que quienes no lo consumen de forma regular.
No se debe olvidar que el pan es una fuente de energía presente en la dieta y según los expertos un alimento básico dentro de la pirámide nutricional que aporta niveles adecuados de minerales e hidratos de carbono. Precisamente, la dieta actual se caracteriza por un consumo excesivo de grasas y proteínas y un consumo deficitario de hidratos de carbono y minerales, lo que supone un alejamiento del modelo saludable de dieta mediterránea, caracterizado por el consumo regular de verduras, hortalizas, cereales y alimentos ricos en hidratos de carbono.
Para los enfermos y enfermas renales, la nutrición es una de las preocupaciones diarias, con el objetivo de favorecer el mantenimiento de la calidad de vida. La Enfermedad Renal Crónica es una patología que reduce la calidad de vida de los pacientes según avanza el tiempo. Los riñones no eliminan los electrolitos del sodio, potasio y fósforo a la velocidad adecuada y la desnutrición aumenta el riesgo de agravar la enfermedad e incrementa el envejecimiento y la mortalidad.
El uso de una dieta mediterránea saludable y los tratamientos nutricionales adecuados en pacientes con diabetes y/o hipertensión se han demostrado altamente eficaces en una de las causas de riesgo antecedentes, hipertensión y diabetes a la aparición de la enfermedad renal, según informan diferentes estudios y especialmente Rosa García Alcón, dietista nutricionista especializada en enfermedad renal crónica y responsable del Gabinete de Nutrición de Alcer Madrid.